Conjunto habitacional de 120 casas de interés social, ubicado en Cuautitlan Izcalli, al norte de la Ciudad de México.

El conjunto se localiza sobre un terreno en forma de trapecio irregular de 25,599.25 m2, que cuenta con una pendiente considerable y con un circuito vial central que conecta las calles privadas del conjunto. La lotificación y el diseño de las avenidas se diseñaron previamente por diseñadores ajenos a la firma, por lo que el proyecto consiste exclusivamente en el tratamiento de ciertas vialidades y en el diseño de una casa tipo de 148 m2 construídos, dentro de un lote tipo de 8 mts de frente x 10 mts de fondo, para ser reproducida 120 veces.

El concepto del proyecto consistió en adaptar la tipología de las casas con el entorno natural que predomina en el lugar y con la topografía, utilizando ciertos elementos conceptuales, tal y como: un carácter esencial, un manejo estructural simple y lógico, un contacto con el entorno exterior, un sentido de introspección y un uso de materiales tradicionales.

Con el propósito de ampliar los recorridos por las avenidas internas planteadas (9 mts), el volumen general de la casa se dirigió hacia el fondo del lote, generando una vivienda con 3 niveles de desarrollo. De esta manera los primeros 5 mts del lote quedaron libres, siendo utilizados para estacionamiento privado de cada vivienda, donde se propuso la integración visual de dicha superficie con la avenida y la guarnición, de tal suerte que las avenidas crecieran visualmente. Esta integración se pretende lograr a través del uso del mismo material en pavimentos y mediante la eliminación de toda barrera física entre los lotes.

Con el propósito de dotar a la casa con la mejor orientación posible para lograr una temperatura óptima todo el año y aprovechar las mejores vistas, se decidió dirigir la casa hacia el sur, abriendo los espacios principales (estancia-comedor y recámaras) en esta dirección (hacia el frente del lote) y mandando los servicios hacia el norte (parte trasera del lote).La casa está conformada por dos volúmenes principales: el cuerpo que contiene todos los espacios habitables y el cuerpo de piedra “desmaterializada”. El primero está diseñado con un énfasis en un funcionamiento óptimo de las operaciones de los usuarios y con una fijación en mantener un sistema estructural sencillo y básico. El segundo está diseñado para contener visualmente, para dotar de privacidad a los espacios de los primeros dos niveles y para brindar un toque de naturaleza que rompa con la aridad de la piedra a través del uso de enredaderas ascendentes.

El programa de cada casa consta de lo siguiente:

Planta baja: acceso, estancia-comedor, patio, cocina, baño de visitas, bodega, patio de servicio.
1er nivel: 2 recámaras, 1 baño completo y vestíbulo.
2do nivel: recámara principal, patio privado, 1 baño completo y vestíbulo.
Azotea: zona de tinaco y tanque de gas.

El diseño contempla que cada uno de los espacios habitables cuente con un patio interior independiente, que permita lo siguiente: mantener una introspección y privacidad total en cada uno de los espacios, expander visualmente dichos espacios (logrando que con un área construída restringida, se obtenga una sensación espacial amplificada) y que cada uno de ellos entre en contacto con el exterior de forma privada y aislada. Es así como la planta baja cuenta con un patio en la zona de la estancia-comedor, los dos cuartos en primer nivel tienen un patio “visual” que extiende los límites de los mismos y la recámara principal en el último nivel cuenta con un patio privado para uso propio.

La casa está diseñada para crecer y expandirse con el tiempo, brindándole al usuario la posibilidad de expandir la vivienda verticalmente según sus necesidades.