El terreno se localiza en Puerto Márquez, en la ciudad de Acapulco, México. Este se encuentra inmerso en la densa vegetación del lugar, con una pendiente pronunciada y con acceso a la playa del lugar.

El programa consistió en hacer un hotel boutique de 60 cuartos, en 9 niveles, sobre un terreno de 10,160.00 m2, con un total de 13,374.8 m2 construidos.

El concepto del proyecto consistió en hacer que el edificio literalmente naciera de la selva, adaptándose a la topografía del lugar, siendo lo menos agresivo con la vegetación y mimetizandolo con la misma.

Para lograr esto, se contempló que cada cuarto estuviera rodeado de pura vegetación, generando conceptualmente una selva privada, el cual se pudiera cerrar o abrir completamente hacia la misma y hacia el mar.

El lenguaje arquitectónico utilizado trata de incorporar no solo la fuerza del entorno natural, sino también la del entorno cultural. Es por ello que se incorpora un lenguaje vernáculo que sensibiliza al usuario con su entorno, pero que al mismo tiempo busca tener un carácter propio y refinado.

El edificio se remata en la parte superior con un volumen completamente ortogonal y de color blanco, que recuerda la arquitectura moderna tropical de los años 60.

El programa consta de lo siguiente:

Planta baja:
Albercas, explanada, baños, bodegas y cuarto de maquinas.

1er Nivel al 6to Nivel:
Habitaciones con selvas privadas.

7 Nivel:
Spa, comedor empleados, baños de servicio, bodega general, cámara fría, cuarto de maquinas y cámara de basura.

8 Nivel:
Administración, lobby, área de lounge con fogatas, bar, baños, y bodega.

9 Nivel:
Albercas, restaurante y baños.